REHABILITACIÓN EN SAN VICENTE DE ELVIÑA
A Coruña
El proyecto se plantea como una intervención de escala media en el entorno inmediato que rodea la ciuda de A Coruña, una situación real debida a la crisis económica que atraviesa nuestra sociedad y al abandono continuo de poblaciones de estas características que vive nuestro país. Se busca la consolidación de San Vicente de Elviña a través de una serie de intervenciones, que permita contribuir a reducir el impacto de las grandes infraestructuras que han ido rodeando al núcleo, además de establecer una mayor relación con el complejo universitario con el que colinda.
Este trabajo propone realizar un conjunto de unidades residenciales, para profesores investigadores con familia, junto con espacios de trabajo, y lugares de reunión social para la comunidad del núcleo. El programa busca la relación y diálogo de dichos investigadores con los habitantes de San Vicente de Elviña. Se trata de revitalizar un lugar en proceso de abandono a través de iniciativas actuales en un territorio con mucho valor como es el gallego.
El proyecto se entiende como un recorrido que parte del gran interés existente por el carácter que presentan cada uno de los espacios que discurren por el eje que desciende desde la cima de San Vicente de Elviña. Un descenso que nos permite conocer todo un repertorio de elementos propios de la arquitectura popular realizados por los habitantes del lugar, además de una sucesión de asentamientos colectivos en torno a esta vía, conocidos popularmente como “rueiros”. Estos espacios se forman gracias a la utilización, para el trabajo de campo, de los espacios próximos a las viviendas, todos ellos ligados a la vía. Una piedra para sentarse a la entrada del hogar y conversar con los vecinos, un árbol que nos cobija y nos da sombra, un cubierta para salir de casa sin mojarte… Todas estas intervenciones realizadas por las personas, con el granito como principal material, están cargadas de emoción, intensidad y un gran sentido común.
La arquitectura debe intervenir en aquellos elementos que no se encuentren en buen estado con el fin de mejorarlos en favor del conjunto. Debido a esto, existe un punto de este recorrido descendente, en el que, debido al deterioro de las edificaciones existentes y a las intervenciones que se han realizado posteriormente, se pierde y se desdibuja esa bonita concatenación de rueiros y espacios comunales, propia del lugar. La actuación tratará de recuperar y dignificar las antiguas y originarias construcciones en mal estado, permitiendo así, volver a establecer una relación a ambos márgenes del eje descendiente y con el resto del núcleo rural. Se intentará reducir la intervención a un único elemento, que tratará de colonizar el lugar y de abrazar la antigua arquitectura respetándola y poniéndola en valor. El hormigón es este nuevo elemento, la nueva piedra de hoy en día, que dará unidad y creará un conjunto con el mismo lenguaje.
Cada construcción realizada a lo largo de este camino, se convertirá en una piedra más de todas las que conforman este conjunto llamado San Vicente de Elviña. Un conjunto que habitarán y disfrutarán las personas, y que se materializará a través de volúmenes que se expresarán como rocas hincadas en el terreno. Unos volúmenes en los que solo habrá espacio, nada más, solo espacio; unos volúmenes masivos que envejecerán con la arquitectura que les rodea; volúmenes que serán erosionados por el agua corriendo por sus paredes y que se entrelazarán con la vegetación, que inundará este pequeño rueiro estableciendo esa transición desde el espacio exterior al núcleo, a través de sendas y de un regato de agua que se recupera, hasta finalizar en un espacio completamente rural.
En el interior de los volúmenes rehabilitados unos núcleos de hormigón que organizarán el todo espacio. Estas estructuras tendrán una relación muy directa con los volúmenes que se hincan y crean el espacio público en el exterior. Estos espacios exteriores, que forman parte de este recorrido monolítico de acceso al lugar, se realizan con un hormigón más bruto y rugoso. Esta sensación brutalista de arquitectura arcaica se acentuará a través de la geometría y los espesores de estas piezas monolíticas que flotan sobre nuestras cabezas.
El hormigón y su masividad como nueva piedra, la vida que crea el agua a su paso, y un jardín cambiante que te introduce, son los conceptos que inundarán y consolidarán San Vicente de Elviña.